EN OTRO FINAL DE TORRES POCO CLARO PERO AÚN MÁS LUCHADO Y EMOCIONANTE SE DECIDIÓ LA SEGUNDA RONDA DE LA FINAL DE CANTIDATOS FIDE 2011.
Esta vez Gelfand llevó las piezas blancas y trás una compleja realización de apertura, donde el bando claro entregó dos piezas menores a cambio de mantener sus torres, se dieron las acciones de una partida que aunque finalizada en tablas brindó excelente motivación y espectación a los miles de seguidores de estos corajudos combatientes del ajedrez.
En un especie de sistema ingles, que recuerda más bien los esquemas tradicionales del ataque indio de Rey, y con un enfoque poco rutinario de las negras conducidas por Grischuk en su dispositivo defensivo Gelfand introdujo un novedoso movimiento de las blancas en su jugada 9.Cg5N, tratando de rescatar posiciones ya conocidas pero con ciertas mejoras que a la postre lo dejaron con cierta ventaja posicional, a pesar del 2x1 que para las negras no fue del todo malo.
La partida trascendió por derroteros poco claros y de múltiples alternativas, primero con un Grischuk tratando de activar a sus piezas menores y torres a la vez de buscar mejorar la ubicación de su monarca situación a la que se llegó luego de ser obviada la jugada 16.b5! que deberá llevar a la revisión de la línea, en vez de la poco eficiente 16.Af4 ensayada por Gelfand.
Al final de la partida y tras el cambio masivo de piezas, Grischuk estuvo a punto de ganar pero dejo pasar un tema clásico de final al buscar el peor final (53...Te1?)con su torre inactiva delante del peón que avanza, lo que le permitó a su rival salvar el juego.
En un especie de sistema ingles, que recuerda más bien los esquemas tradicionales del ataque indio de Rey, y con un enfoque poco rutinario de las negras conducidas por Grischuk en su dispositivo defensivo Gelfand introdujo un novedoso movimiento de las blancas en su jugada 9.Cg5N, tratando de rescatar posiciones ya conocidas pero con ciertas mejoras que a la postre lo dejaron con cierta ventaja posicional, a pesar del 2x1 que para las negras no fue del todo malo.
La partida trascendió por derroteros poco claros y de múltiples alternativas, primero con un Grischuk tratando de activar a sus piezas menores y torres a la vez de buscar mejorar la ubicación de su monarca situación a la que se llegó luego de ser obviada la jugada 16.b5! que deberá llevar a la revisión de la línea, en vez de la poco eficiente 16.Af4 ensayada por Gelfand.
Al final de la partida y tras el cambio masivo de piezas, Grischuk estuvo a punto de ganar pero dejo pasar un tema clásico de final al buscar el peor final (53...Te1?)con su torre inactiva delante del peón que avanza, lo que le permitó a su rival salvar el juego.
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